Hace
unos días vi este cortometraje (1):
Ha ido
rondando las redes sociales, siendo recomendado por su contenido, ya que
celebra la amabilidad y la comprensión. Es un corto bonito, y, sí, destaca
estos valores.
Pensaba
en el corto ya que le estoy dando vueltas estos días a cómo nuestra mente
interpreta las situaciones en base a la información que tiene disponible, y
cómo esto puede llevarnos a conclusiones y acciones poco adecuadas y que no nos
ayudan. Así que le daba vueltas a cómo el protagonista cambia radicalmente su
conclusión y, por ende, su comportamiento, al acceder a una información
adicional que desconocía, y, de repente, atino en otra lectura: el corto puede
llevarnos a pensar que cuando hacemos algo por alguien, obtenemos una
devolución de ese alguien equivalente. Y pienso: Ufff, qué peligro.
¿Cómo
puede ser peligroso dar por supuesto que lo que hagamos “de bueno” nos ofrece automática
y directamente una devolución? Suele ser un mensaje recurrente en fábulas,
cuentos, películas…, éste y el contrario: las malas acciones conllevan también
una devolución, en este caso negativa.
En mi
opinión, es un peligro ya que nos puede llevar a la frustración. Y a eso viene
lo del título “¿Me lo merezco?”. Creo que nadie se merece nada (ni bueno ni
malo), no creo en el karma (2) ni bueno ni malo. Creo en que cada uno tengamos
nuestra ética, nuestra coherencia, nuestros valores bien claros y, en base a
ellos, nos comportemos y actuemos, sencillamente porque son nuestra ética,
nuestra coherencia y nuestros valores, no porque entendamos que con ese comportamiento
y esas acciones vayamos a tener un retorno equivalente.
Sé que
ayuda pensar que, si trabajo duro, o si soy amable, o lo que sea, conseguiré
eso o lo otro porque me lo merezco, o que, sencillamente, la vida me dará un
trato amable, pero no es así, hay muchos factores que están fuera de nuestra
área de influencia. Y sí, pienso que seguro que hay un montón de personas que
se comportan y actúan con malicia y poco respeto por los demás y que viven una
vida agradable. Es así y punto.
Yo creo
que transmitir la idea de que existe esta “compensación” directa y equivalente
a nuestro comportamiento y a nuestros actos nos facilita optar por ellos en el
corto plazo, pero puede llevar a crear frustración, rabia y resentimiento en
aquellos que lo crean profundamente y no vean sus expectativas cumplidas. Esta
frustración suele acompañarse de un ejercicio de buscar la causa (o más bien
la culpa) en otros, y no en, quizás, una estrategia y/o unas expectativas poco
adecuadas y/o sencillamente, unas circunstancias fuera de nuestra influencia.
Creo
que saber transitar por la vida con tu ética, tu coherencia y tus valores
claros y alineados con tu comportamiento y tus acciones es la única y mejor
recompensa a la que debes aspirar.
(1) Comentario: figura en youtube como ganador de
un oscar a mejor cortometraje de animación, pero he sido incapaz de encontrarlo
mencionado como tal en ningún sitio. Puede que sea otra muestra de lo fácil que
es encontrar información incorrecta en internet. Sí que lo he encontrado como
anuncio de marca para unos grandes almacenes chinos: https://brandinginasia.com/chinas-jd-com-releases-joy-story-animated-short-film-campaign-spot/.
(2) En
ese karma que, desde mi ignorancia, entiendo como que tus acciones bondadosas te
retornan bondad.