Te
propongo un cambio para estas Navidades: que hagas un ejercicio, que no te
llevará tiempo ni dinero, y que, de cara a 2017, va a ayudarte a cumplir tus
propósitos.
Elige
uno de tus propósitos para el nuevo año: mejorar tu relación con la comida, con
las compras, con internet, con los WhatsApp, con el ejercicio físico, … lo que
sea.
Con
este ejercicio que voy a proponerte vas a descubrir cómo funciona tu mecanismo
de recompensa. Utilizaré el ejemplo de la relación con la comida (1).
Ejercicio
de descubrimiento:
Primer
paso: cada
vez que sientas el deseo de comer sé consciente de que lo sientes y no te
apresures, deja unos minutos y sigue los pasos que te propongo.
Segundo
paso: observa
cómo te sientes, si estás ansioso, excitado, triste… ¿Qué estabas haciendo
cuando ha surgido el deseo? ¿Hacía tiempo que lo estabas haciendo? ¿En que
pensabas?
Tercer
paso: intenta
describir qué ha detonado tu deseo: ¿sientes realmente hambre?, “comer con los
ojos” (te sientes lleno, pero…es que tiene una pinta…), “huele de maravilla…”, “sabe
tan bien…”, “es la hora…”, “me aburro…”, “estoy ansiosa…”, “me siento triste…”,
“me siento sola…” etc.…
Cuarto
paso: piensa
en cómo crees que te vas a sentir después de comer lo que vayas a comer.
Quinto
paso: date
permiso y come.
Sexto
paso: ¿Cómo
ha sido? ¿Sigues sintiendo deseo? ¿Estás satisfecho? ¿O te sientes
frustrado?... ¿Cómo te sientes?
Ayuda
enormemente – lo recomiendo – que anotes todo en un cuaderno. Es más fácil, al
cabo de unos días, detectar los patrones.
Este
ejercicio tendrá, entre otras, las siguientes consecuencias:
1.- Al
observar directamente la experiencia pierden fuerza las promesas de recompensa.
2.- Serás
más realista con las expectativas, con lo que, o bien necesitarás menos para
satisfacerte, o te darás cuenta de que no consigues satisfacción alguna.
3.- Te
darás cuenta de los “condicionamientos” que detonan el deseo (2).
Cuando
finalmente entiendas cómo te hace sentir la “recompensa” buscada a través del
comportamiento que quieres cambiar, sabrás tomar mejores decisiones sobre si te
“recompensas” o no y cómo lo haces. Conquistarás un espacio de libertad.
Seguiremos
con este tema para que, en 2017, tengas más opciones de estar entre el 20% que
sí va a cumplir sus propósitos.
(1)
Hablaré más a fondo de este tema en 2017.
(2)
Por ejemplo: una vez veas que siempre que te estresas te calmas con galletas de
mantequilla, este condicionamiento va a ir perdiendo fuerza sobre ti. El
siguiente paso será cambiar el comportamiento. Una vez lo veas, podrás decidir
el comportamiento y, aunque sea el mismo, como mínimo será tu elección.