viernes, 24 de agosto de 2018

Usando mis superpoderes


Sigo leyendo el libro “La vida secreta de los árboles” y me sigue desvelando curiosas conexiones con mi día a día.


Y es que todos nosotros tenemos en común dos recursos: tiempo y energía. Las decisiones que tomamos a lo largo del día (1) tienen que ver con a qué dedicamos ambos recursos. 

Al igual que los árboles en el bosque, puede que, alguna vez, nuestra decisión sea centrar nuestros recursos en un tema o aspecto sin poder dedicar el tiempo y energía suficientes a cuidarnos, a recargar. Y puede que nos salga bien, y podamos recuperarnos del desgaste más adelante. Siempre es un riesgo, pero esto no hace que la estrategia sea mejor o peor, dependerá de las circunstancias, del objetivo y de quien toma la decisión. 


Y, tal como se lee en este otro extracto, hay estrategias que te permiten ahorrar tiempo y energía contando con otros miembros de la “comunidad” y otras que te requieren gastar todo el tiempo y energía por no querer, poder o saber contar con el apoyo y colaboración de otros.

En definitiva, toda estrategia es válida siempre que seamos conscientes de adonde nos lleva, que nos requiere y los posibles riesgos asociados. 

Vivimos en una época maravillosa. Jamás habíamos tenido tanto a nuestro alcance, tantas opciones, tantos caminos, tantas posibles decisiones sobre a qué dedicamos nuestro tiempo y energía... y es esa misma cantidad de opciones la que, a veces, nos bloquea, nos frustra, nos desorienta, porque no es posible optar por un camino sin dejar atrás otros, porque escoger es un verbo que va de la mano con renunciar. Y, para rematarlo, nada nos asegura que, una vez escogido el camino, podamos llegar por mucho que sea el esfuerzo invertido.

¿Y todo esto hace que esta época sea menos maravillosa? Yo creo que no. Lo que sí hace es exigirnos mucho. Sobre todo, nos exige ejercitar muy a menudo uno de nuestros superpoderes: decidir cómo vivimos cada momento. Si abro o no la puerta a la frustración, al desaliento o a la complacencia es mi decisión o debería serlo.

Ahí te dejo esta reflexión.




  
(1) Para que te hagas una idea, ya solo contando con las decisiones que tienen que ver con lo que comemos llegamos a las 200 decisiones diarias…https://foodpsychology.cornell.edu/research/mindless-eating-200-daily-food-decisions-we-overlook




No hay comentarios:

Publicar un comentario